Octubre, ese mes lleno de magia, misterio y una energía especial que parece transformar el ambiente. Las hojas caen, el aire se enfría y las noches se alargan. Hay algo en el viento que nos invita a mirar hacia adentro, a conectar con lo invisible, lo que no podemos ver, pero que sentimos profundamente. ¿Alguna vez te has preguntado por qué octubre se asocia tanto con brujas, sabios y seres conectados con la naturaleza y lo espiritual? Es más que simples disfraces o cuentos de terror. Octubre, en muchas culturas, es el mes donde el velo entre nuestro mundo y el espiritual se vuelve más delgado, permitiéndonos acceder a sabiduría ancestral, a energías poderosas y a las respuestas que, quizás, llevamos buscando todo el año.
Este es el mes de las brujas, pero no de las que suelen mostrar las películas de Hollywood. No hablo de aquellas que son malas o hacen hechizos para causar daño. Hablo de las verdaderas brujas: mujeres y hombres sabios, aquellos que, desde tiempos antiguos, han sabido cómo trabajar con la energía de la Tierra, el cielo y los elementos para traer sanación, equilibrio y poder personal. Octubre es su tiempo, su momento, y es también el momento de que todos nosotros, de alguna forma, conectemos con esa parte sabia que llevamos dentro.
¿Quién no ha sentido en estas fechas la necesidad de reflexionar, de mirar el pasado, de pensar en lo que ha sido y en lo que está por venir? Es natural. El mes de octubre, especialmente hacia finales con la celebración de Samhain o el Día de los Muertos, marca un tiempo de transición. Es un puente entre lo que ya no es y lo que está por venir, entre el mundo visible y el invisible. Y por eso, no es de extrañar que las brujas y los sabios hayan sido las figuras centrales de este mes, aquellos que saben cómo moverse entre esos dos mundos.
La sabiduría ancestral: mujeres y hombres que comprendían los ciclos de la vida
Durante siglos, las brujas fueron aquellas personas que tenían una conexión profunda con la naturaleza. Eran los curanderos, los consejeros espirituales, los que conocían las plantas y las estrellas. La sociedad, temerosa de lo que no entendía, las etiquetó de peligrosas. Sin embargo, su poder no provenía de un lugar oscuro, sino de su capacidad para entender el mundo de una manera más amplia, para ver más allá de lo evidente. Sabían que la vida y la muerte son solo dos caras de la misma moneda, y que en medio de todo, hay una energía que fluye y que podemos aprovechar para nuestra sanación y crecimiento.
Octubre, en ese sentido, se convierte en el mes perfecto para honrar a estas personas sabias. La naturaleza misma nos lo pide. Las hojas que caen de los árboles no están muriendo; están transformándose, alimentando el suelo para que la vida resurja nuevamente en primavera. Es un recordatorio de que todo es cíclico, y las brujas, los sabios, siempre lo han sabido.
¿Por qué octubre es un mes poderoso para la magia?
Este mes, con sus noches largas y la sensación de lo "otro" en el aire, es ideal para trabajar la magia, pero no esa magia de varitas y hechizos de películas. La verdadera magia es la transformación interna. Octubre nos invita a soltar, a dejar ir lo que ya no nos sirve, a hacer espacio para lo nuevo. Es el mes donde el velo entre los mundos se hace más fino, lo que significa que nuestras intenciones y rituales tienen más poder, que podemos acceder a esa sabiduría ancestral con mayor facilidad.
Por eso, octubre es un mes perfecto para rituales de cierre, de introspección y de conexión con nuestros ancestros. Es un momento para honrar a los que vinieron antes que nosotros, a aquellos que dejaron huella en nuestra vida y que, desde el otro lado, nos siguen guiando. No por nada, las brujas y los sabios eran, en muchos casos, también los encargados de guiar a sus comunidades a través de este tipo de procesos.
Samhain y Halloween: dos caras de una misma moneda
Aunque hoy en día Halloween es más conocido por disfraces y dulces, sus raíces están profundamente conectadas con Samhain, la festividad celta que marca el final de la cosecha y el inicio del invierno. Para los celtas, Samhain no era solo una celebración; era un momento de profunda reflexión y de conexión con los muertos. Creían que en esta fecha, el velo entre el mundo de los vivos y el de los muertos se desvanecía, permitiendo que los espíritus cruzaran y visitaran el mundo de los vivos.
Las brujas, sabios y sabias, tenían un papel fundamental en estos rituales. Eran los mediadores entre ambos mundos, los que podían interpretar las señales de los espíritus y guiar a la comunidad en cómo aprovechar esta energía para sanar, soltar y avanzar. Octubre, en ese sentido, no solo se trata de lo que ha sido, sino también de lo que está por venir. Es un mes de transición, de preparación para el invierno y de reflexión sobre el ciclo de la vida.
¿Cómo puedes conectar con la energía de octubre?
Si hay un momento para reconectar contigo mismo, con tus raíces y con tu sabiduría interior, es este. Octubre te invita a tomarte un momento para ti, para detenerte y escuchar lo que el viento te susurra, lo que tu intuición te dice. Puedes aprovechar este mes para realizar rituales sencillos, como encender una vela y meditar sobre lo que quieres dejar ir antes de que el año termine. También es un buen momento para conectar con tus ancestros, para agradecer por todo lo que te han dado, y para pedir guía en el camino que tienes por delante.
Octubre, un mes de magia y sabiduría
Octubre no es solo el mes de las brujas. Es el mes de la sabiduría, de la introspección y de la conexión con lo invisible. Nos recuerda que somos parte de un ciclo mayor, que hay fuerzas que nos guían y que, si aprendemos a escucharlas, podemos encontrar respuestas que hemos estado buscando durante mucho tiempo. Aprovecha la energía de este mes para mirar hacia adentro, para reconectar con esa parte de ti que sabe, que siente, que intuye. Al final del día, todos llevamos una bruja o un sabio dentro de nosotros, esperando a ser escuchado.
Este octubre, deja que esa parte de ti hable más fuerte que nunca.
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